En la primera quincena de septiembre, la edición española de MADDIE, LA VERDAD DE LA MENTIRA
Un libro para desempolvar un pasado oculto: la visión de quien tuvo que investigar un caso que se reinventó en diversas ocasiones. Madeleine es parte ya de un imaginario popular envuelto entre certezas, sospechas y leyendas. Ahora, un libro intenta poner algo de luz o, dicen otros, envolverlo más en la sombra. El ex inspector de la Policía lusa que investigó la desaparición de Madeleine McCann, Gonçalo Amaral, presentó ayer su libro «Maddie, la verdad de la mentira». No han dejado indiferente a nadie las conclusiones de Amaral: «El cadáver de la niña británica desaparecida fue congelado y escondido probablemente por sus padres», mantiene. En una entrevista al diario luso «Correio da Manha», el antiguo detective, apartado del caso en octubre y jubilado anticipadamente, descarta nuevamente la tesis del secuestro de la niña y asegura que fue un montaje basado sobre todo en testimonios falsos de la madre, Kate McCann, y de su amiga Jane Tanner.
Gonçalo Amaral
